Pequeña guía práctica de cuestiones a tener en cuenta a la hora de elegir fotógrafo y tipo de reportaje

Acaba de empezar el 2019 y muchos padres y madres ya ultiman los preparativos del que será un acontecimiento muy especial en la vida de sus hijos e hijas: el día de su primera comunión. Y, como suele ocurrir, las fotografías no deben faltar en un día tan importante, por lo que toca tomar decisiones sobre este aspecto y sabemos por experiencia que para muchos padres es difícil valorar entre las distintas opciones. Por eso, nos hemos decidido a escribir este artículo para ayudarles en esta tarea.

Una primera decisión que habrá que adoptar es si recurriremos a un fotógrafo profesional o nos conformaremos con las fotos que podamos hacer nosotros o nuestros familiares con el móvil o con alguna cámara. Sé que depende de los presupuestos y que muchas familias no pueden gastar mucho dinero, pero siempre he pensado que las fotos son los recuerdos que os quedarán en el futuro de un día tan bonito y especial para los niños, por lo que mi consejo es recortar un poco de otros gastos y reservar algo de dinero para poder contratar a un profesional. Y no es sólo porque te garantizas un reportaje de calidad, sino porque también os permitirá disfrutar del día sin preocuparos por el tema de las fotos.

Si finalmente habéis decidido contratar a un fotógrafo, son muchas las cuestiones a tener en cuenta para elegirlo. ¿Cuándo se harán las fotos? ¿Cuánto tiempo durará aproximadamente la sesión? ¿Dónde se hará? ¿Qué cuestiones adicionales incluye el reportaje? ¿Se necesitará algo especial para la sesión? ¿Se harán fotos con los padres y hermanos, si los hubiera? ¿Álbum sí o no? Como veis, son muchas preguntas que hay que ir resolviendo y hablando con el fotógrafo/a que hayáis elegido. Mi consejo es que preguntéis todo lo que os preocupe u os interese, para dejarlo todo claro antes de cerrar el acuerdo o contrato.

Vayamos poco a poco. Uno de los primeros temas a aclarar será la fecha del reportaje y qué incluye éste. En muchas de las iglesias, lo habitual es contratar a un sólo fotógrafo entre todo el grupo de padres y madres para que cubra lo que es el evento religioso, es decir, las fotos durante la misa y la primera comunión en sí. Deberéis preguntar si en vuestro caso es así o no.

Pero, independientemente de esto, lo habitual es hacer un reportaje antes de la comunión en el que tomemos algunas fotos del pequeño o pequeña con su vestido, e incluso también con ropa más informal y de calle. Esto nos servirá para tener un recuerdo mucho más personalizado e individual y también, si el acuerdo con el presupuesto por el que hemos optado lo incluye, para elaborar un álbum con esas fotos y/o recordatorios para repartir entre los familiares y amigos que nos acompañen ese día.

Fotografía de primera comunión en estudio fotográfico
Fotografía de primera comunión en estudio fotográfico

Uno de los aspectos que hay que aclarar también es si ese reportaje se hará en un estudio fotográfico o en exteriores. Esto dependerá de muchos factores. Nuestras preferencias y las del fotógrafo que hayamos elegido, la disponibilidad de tiempo que tengamos y, especialmente, la meteorología. Los que vivimos en Andalucía tenemos la suerte de contar con muchos días de sol, por lo que hacer un reportaje en exteriores es mucho más fácil que en otras zonas de España. Aún así, es posible que en la fecha que hemos elegido, el tiempo esté malo y tengamos que hacerlo finalmente en un estudio. En otras regiones, ésta será probablemente la opción más viable. Obviamente, el tipo de reportaje será distinto, pero lo cierto es que los tiempos han cambiado y en estudio se están consiguiendo cosas muy chulas.

Para evitar sorpresas y tenerlo todo organizado, también conviene dejar claro cuánto tiempo aproximado durará la sesión, ya que no es lo mismo disponer de una hora que de tres, por ejemplo. Es algo que deberéis hablar con el profesional al que hayáis elegido para tenerlo claro.

Además, es importante saber si necesitaréis algo especial para el reportaje. Os explico. Por ejemplo, a mí me gusta hacer fotos también con ropa de calle o elementos de fantasía, de forma que el reportaje no incluya sólo las fotos con el traje de comunión, sino también algunas imágenes más informales y originales. También suelo incluir fotos con la familia (padres y hermanos, generalmente) e incluso fotos con algún elemento especial que defina un poco al niño o niña, sus gustos e intereses. Es el caso, por ejemplo, de aquellos pequeños que tocan algún instrumento, juegan a algún deporte concreto o tienen algo que les gusta mucho y que se puede usar en las fotografías. Por eso, es bueno saberlo para no olvidar nada ese día.

Imagen tomada en un reportaje de primera comunión con una vestimenta diferenteY, por supuesto, algo que debemos tener muy claro es cómo se entregará el reportaje y qué incluye el presupuesto por el que hemos optado. En este punto, tendremos que saber si nuestra opción incluye o no la elaboración e impresión de un álbum fotográfico, de qué tipo es éste y cuántas páginas tiene. También si se entregarán elementos adicionales, como recordatorios o marcapáginas, fotos impresas, libros de firmas, etc. No podemos olvidar tampoco saber cuántas fotografías nos entregarán en formato digital. Los fotógrafos solemos tener distintos packs con diferentes presupuestos, por lo que no dudéis en preguntar por las opciones que existen. En mi caso, yo soy de las que suele preferir las fotos impresas, porque son un recuerdo que tendrás para toda la vida, pero entiendo que hay familias que tienen otras preferencias.

Por último, pero no menos importante, debemos saber el tiempo aproximado de entrega de las fotos. En muchos casos, cuando se imprime un álbum, los padres quieren que éste esté listo para el día de la comunión, de forma que el niño o niña lo pueda enseñar a sus familiares y amigos. Lo mismo ocurre con los recordatorios: no tendría mucho sentido entregarlos una vez pasada la celebración. Por eso, plantear el reportaje con la suficiente antelación y definir los plazos de entrega es sumamente importante.

Y no quiero cerrar este artículo sin daros un último consejo: es un día muy especial y lo importante es relajarse, pasarlo bien y disfrutar con nuestros pequeños. Muchos padres viven este momento con estrés y preocupados porque todo salga bien, cuando lo importante es que vosotros y vuestros hijos disfrutéis del momento porque es único y no volverá a pasar. No presionéis ni aconsejéis a vuestros hijos sobre cómo ponerse o cómo posar, ni los corrijáis para que no hagan esto o lo otro, dejarlos que se relajen, se diviertan y que sigan las indicaciones que le dé el fotógrafo o fotógrafa que hayáis contratado para su primera comunión. Seguro que las fotos quedan geniales si lo hacéis así. Los niños de esa edad son muy sensibles y si los presionáis un poco se agobiarán y lo pasarán mal. Sin embargo, os garantizo que, si os relajáis y procuráis divertiros, eso se verá en el reportaje y tendréis unas fotos inolvidables. Así que, ¡a divertirse!

Con esto, ponemos fin a esta pequeña guía práctica sobre reportajes de comuniones y qué cuestiones hay que tener en cuenta y hablar con el fotógrafo. Esperamos que os sirva de ayuda. Y si tenéis cualquier duda más o queréis preguntar por precios y packs de fotografía de comuniones, no dudéis en escribirnos a través de este formulario. Estaremos encantados de atender a vuestra consulta.

Fotografía de comunión en exteriores
Fotografía de comunión en exteriores
Fotografías de primera comunión en estudio -Ca
Fotografías de primera comunión en estudio